esta pagina existe para destacar aspectos poco iluminados en mi arte
pero que aún así quiero destacar en algún lado por lo menos una vez, que se tenga registro de cuánto me importan.
24/8/25, se ha hablado de:
acariciar mal un gato (mmtf)
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acariciar mal un gato, mi canción favorita en la carrera universal hacia no entendernos
y francamente, el punto de desvío hacia un enfoque más serio y profundamente personal
a inicios de año, esteban presentó gran parte del sonido clásico de mi memoria tomando forma en un festival que tomó lugar en las afueras de los ángeles, junto a una formación de músicos con los cuales estas canciones lograron ser interpretadas en este formato en vivo.
sin embargo, esteban apenas logra recordar el evento. solo un momento parece firme con él
en sus palabras:
durante ensayos siempre hubo un desbalance en disposición de comunicar intenciones y en general sentía un desbalance en motivación por que siquiera salga bien.
estos ensayos, siempre apuntaron hacia presentarnos en vivo cuando la oportunidad nos llame de vuelta.
en esta última [el festival] unos segundos antes de comenzar el set, uno de los músicos me dejó con un mal sabor social de boca el cual me perturbó hasta el final de la noche
no recuerdo lo que dijo a malas pulgas exactamente. pero, me encuentro en una posición sólida acerca del sentimiento que logró transmitir en expresión y el que me provocó en consecuencia.
después del set, a pesar de haber sido aplaudidos y bien recibidos, me abrumó demasiado la experiencia de una primera presentación de aquel nivel. aún no entiendo bien aquel rechazo
al final, en busca de un escape, caminé hacia aglomeración minima en campo, campo el cual llevaría eventualmente hacia la carretera.
recitando en mi caminata desesperada por comodidad e ingenua ante seguridad, nuevas palabras encontraron camino hacia mí:no hay amor en el amor. no hay amor en el amor. no hay amor en el amor. no hay amor en el amor.
estas palabras resuenan con cada rincón lírico y consecuente de la carrera universal hacia no entendernos.
y a pesar de que su inclusión en acariciar mal un gato fue fútil, todo el álbum igualmente sigue esta actitud, lo cual solo añade a todo lo que ya le envuelve.
la desesperación por comodidad espiritual pura y el desprecio irracional hacia una inevitable respuesta a las demandas impresas en desear algo así
